Parecida a las canciones, llena de lo que fue y jamás continuó siendo…
Pero un poco más inesperada. No la esperé, después de haber luchado tanto contra mis demonios.
Sigue siendo la misma, tal vez, temerosa y escondida en la vehemente soledad que me envuelve.
Parecida a ese poema, acechado de dolor, del peso del tiempo… los años que con sus sonidos finalmente resuenan hasta dejar sordo a mi corazón.
Mi mente acorralada de un pasado decembrino, que gritó a mi cuerpo vacío esa ausencia, la partida del viajero en un barco sin destino, quien regresaría cuando las flores marchitaron, y volvió a partir, ésta vez sin dolor…
Solo espero, la nada…porque de esperar ya me agoté, tanto que hasta mis ojos ya no lloran, ni para vivir esta nostalgia, remarcar el camino extraviado, entibiar mis manos cada vez más frías, o para enredar mis dedos en una sola estampa de esperanzas…
Ha revivido la nostalgia, tan extraña pero necesaria, llenándome de fragmentos que cobijan mis noches inquietas…
Continúo recordando… el beso grabado debajo del árbol, siendo testigo el aire que susurraba a nuestras espaldas, el principio de una nueva historia… las caricias confundidas entre sábanas…recorriendo una y otra vez, el destello de la eternidad… todo ello fue incendiándose en la más pasional de las hogueras, para luego apagarse con la celosa lluvia, que a su calma solo trajo polvo, ahora ya esparcido entre aflicciones.
Tantas veces al reír he llorado por dentro, como si mi sonrisa fuese el exilio de mis momentáneas alegrías… la prisa filtrándose, hundiéndose en las horas, pintando a blanco y negro más enigmas, aumentando las fronteras entre el silencio y las miradas… sin embargo aún batallo, no cedo al helado cosquilleo del dolor, que por momentos roza mis oídos, pronuncia levemente querer volverme a poseer, y fingir que es mi más íntimo amigo, burlándose, perforando mi carne.
He querido demasiado… cansada de querer, probé muchos labios, insípidos, otros empapados de misterio, y algunos, un poco más cercanos a los suspiros cavados detrás de mis memorias.
De todas formas he sabido que perdí lo que nunca fue mío.
De todas formas aprendí que lo que espero no existe, porque no sabrá encontrarme.
De todas formas la nostalgia enfermará cuando quiera, lo que siempre me convenzo que ya he curado…
He de huir, con estas ganas de volar, abrazando las nubes y los rincones de paraísos imaginarios.
Huiré de mí, para seguir tropezando conmigo, y mis toxinas, mis ilusiones, mis hojalatas cortando las venas cuando vuelva a despertar…
Huiré de la nostalgia y volveré a nacer de ella... y de nuevo moriré, disfrazada de infinito.
....
ResponderEliminaraush...
Así me siento hoy.... Que las sombras nos cobijen. <3
ResponderEliminarYo también he perdido lo que nunca fue mío, y lo sigo, y tal vez, seguiré esperando, en vano... necesito un poco de luz en mi alma!
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